Por Víctor Octavio García
Depredación pesquera
* ¿Y pesca?
Dos hechos delicados denunciados esta semana que forman parte de la cotidianidad en las costas sudcalifornianas, dan pie a robustecidas sospechas de que autoridades pesqueras, tanto federales como estatales, están coludidas con las embarcaciones pesqueras que depredan en nuestros mares un día sí y otro también; sí la depredación se da es porque no hay vigilancia y los controles no operan, de lo contrario no estaríamos lamentando lo que sucede.



A mediados de diciembre –en medio de las posadas y del fervor navideño– Sagarpa, Profepa, Sub Delegación Federal de Pesca y la Secretaria Estatal de Pesca y Acuacultura -¡ah pa’ nombrecito!– entre otras dependencias, montaron un espectáculo solo visto en estas tierras: Arman un operativo sorpresa para “inspeccionar” las actividades desplegadas por un grupo de pescadores de Chiapas en el campo (paraje) pesquero de La Ventolita (Conquista Agraria). Llegan al “paraje” en medio de un gran dispositivo –al viejo estilo–, toman el “paraje” por sorpresa; revisan y cotejan permisos de pesca a pescadores ribereños, levantan actas y se van.