Por Víctor Octavio García
Deshojando la margarita
* Isidro Jordán, en la espera
Desde hace varios ayeres que conozco a Isidro Jordán Moyrón, como conozco a su familia, no sé si cuadre decir que soy su amigo, yo me siento su amigo, cuando lo veo que es muy eventual, le digo, “Cuidro”, cuando seas gobernador escribiré tus crónicas o al menos me das la discreta chamba de cargarte del maletín” y se ríe, así es el “Cuidro”, discreto; parco y austero hasta en el hablar, lo que no me exime de plantearle un sentido reclamó que almacenó en mi ronco pecho; decía Adolfo Ruiz Cortinez, el presidente viejito y “cabulero”, que la “amistad siempre debe traducirse en la nómina”, cosa que yo nunca he visto.





En la anterior entrega de esta columna nos referimos a la propuesta de “ley de ingresos y presupuesto de egresos” del gobierno de Carlos Mendoza, presentada en tiempo y forma al Congreso local por el orden de 12 mil 600 MDP; se trata de su primera propuesta financiera de gasto público y la manera en que piensa ingresarlos, porque como se sabe su mandato arrancó el pasado 10 de septiembre, pero con un presupuesto que ya se venía ejerciendo desde 8 meses antes y era el último año de Marcos Covarrubias, y en ese sentido prácticamente poco se pude innovar ni proyectar más obras, que las que estaban en curso.
