Por Jesús Ojeda Castro
- Con la detención de la jefa del SNTE quedan en desamparo político Alfredo Reyes Cervantes, Jorge Miguel Cota Katzestein y Juan Manuel Fort Mayoral.
- Nombran más delegados federales en BCS.
- El Gobernador Marcos Covarrubias Villaseñor cierra filas con el Presidente Enrique Peña para preservar el estado de derecho en el país.
Con la detención de la dirigente vitalicia del Sindicato de Trabajadores de la Educación (SNTE), Elba Esther Gordillo Morales, quedó demostrado que existe la intención del gobierno federal de demostrar que no habrá ningún tipo de consideración para quienes pretendan denostar o minimizar la figura presidencial como lo hizo la lideresa magisterial con otras administraciones federales, pues es más que obvio que la ahora encarcelada, tenía mucho tiempo haciendo del dinero de los educadores sindicalizados lo que se le antojaba.
Obviamente las acciones de Elba Esther Gordillo no deben quedar impunes y se tendrá que aplicar lo que la ley señale respecto a las presuntas violaciones cometidas sobre su desbordado, grotesco y evidenciado enriquecimiento.
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