Por Jesús Ojeda Castro
- Con la detención de Luis Armando Díaz, Guillermo Jáuregui y Héctor “El Pipi” Ibarra se derrumba la alianza de Antonio Agúndez con el PRI a través de Ricardo Barroso.
- Falta por detener al exgobernador y presunto delincuente Narciso Agúndez quien se dice amparado por las autoridades respectivas.
- El Gobernador del Estado Marcos Covarrubias Villaseñor, resaltó la importancia de las secretarias el conmemorar ayer su día.
Con la detención de los exfuncionarios de la pasada administración estatal, queda claro que el cumplimiento de la ley puede y debe realizarse independientemente de quién o quiénes hayan sido los que precisamente han violentado los preceptos legales.
Los que ayer se encumbraron y lucharon hasta donde pudieron para perpetuarse en el poder político estatal, hoy están tras las rejas acusados de violentar la ley y de no cumplir adecuadamente su encomienda como funcionarios públicos.
Luis Armando Díaz, Guillermo Jáuregui, así como Héctor “El Pipi” Ibarra, han probado las consecuencias de haberse aprovechado de un cargo público y aunque es obvio que obtendrán una fianza para recuperar su libertad, lo cierto es que queda claro el mensaje de que se pretende acabar con los tiempos en que la impunidad era la principal característica para que funcionarios estatales hiciera de las suyas.
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