Por Juan Carlos Méndez Ramírez
Solidaridad Sudcaliforniana
Dos palabras definen el momento tristísimo vivido en el Congreso del Estado, con Silvestre de la Toba Camacho y su hijo amado Fernando de la Toba Lucero, en calidad de testigos trascedentes: Solidaridad y Dignidad…La primera de ellas, citada en un parlamento memorable expresado por Marisela de la Toba Camacho, la hermana querida que, tomando fuerzas del cielo, nos convocó a la solidaridad sudcaliforniana, como base primaria de nuestra cohesión comunitaria. La segunda, pronunciada por una heroína ante la adversidad maligna, la hija amada Silvia Marian de la Toba Lucero.