Perdonen al Presidente
Antonio Ceja
Dicen que es mejor pedir perdón que pedir permiso. Bajo esa premisa, el presidente Enrique Peña Nieto, a dos años de dejar la presidencia, pidió perdón a los mexicanos por el bochornoso caso de la Casa Blanca propiedad, dicen, de su esposa Angélica Rivera la cual pagó con su propio dinero producto de sus temporadas como actriz de la empresa Televisa -convertida en proveedora de esposas de altos políticos- y que despachara a nivel mundial Carmen Aristegui.
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