
Loreto vive su jornada más violenta en su historia
Loreto (California) — La violencia alcanzó un punto de quiebre en Loreto. La inédita masacre registrada la mañana del martes —la más grave en la historia reciente del puerto— dejó entre sus víctimas a un niño de apenas diez años. La noticia ha sacudido profundamente a la comunidad loretana, que hasta hace poco presumía ser una de las ciudades más tranquilas de Baja California Sur. Hoy el miedo, la indignación y la exigencia de protección dominan el ambiente.
Los hechos: dos ataques y vidas arrebatadas
De acuerdo con el reporte oficial de la Mesa de Seguridad de Baja California Sur, cuerpos federales, estatales y municipales respondieron alrededor de las 7:00 de la mañana a reportes de disparos en dos puntos distintos de la colonia INVI-Miramar.
El primer ataque ocurrió en la calle Diez, entre Honduras y Nicaragua, donde las corporaciones encontraron a cinco personas heridas por arma de fuego. En ese mismo sitio se confirmó la muerte de cuatro integrantes de una familia: un niño de 10 años, y tres jóvenes y adultos de 18, 21 y 48 años. Uno más, un hombre de aproximadamente 22 años, fue trasladado de urgencia a un hospital.
Minutos después, en la calle Acueducto y una vialidad sin nombre, fueron localizados los cuerpos de un hombre y una mujer. Sus identidades aún están siendo verificadas.
La Procuraduría General de Justicia del Estado abrió la carpeta correspondiente e inició las investigaciones para esclarecer el origen y móvil de ambos ataques. En tanto, las fuerzas de seguridad mantienen un operativo en la zona para evitar nuevas agresiones y reforzar la vigilancia en todo el municipio.
Reacción oficial: llamados a la Federación y llegada de refuerzos
La alcaldesa de Loreto, Paz Ochoa Amador, utilizó sus redes sociales para anunciar que solicitó la intervención directa del titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana del Gobierno de México, Omar García Harfuch. Además, confirmó que, en coordinación con el gobernador Víctor Manuel Castro Cosío, personal de la Secretaría de Marina y otros cuerpos federales ya se dirigen al municipio.
“Con la seguridad de hacer lo que me corresponde por mi Loreto”, expresó la edil en su mensaje.
Postura política: condenas, llamados de unidad… y críticas en el trasfondo
El diputado federal del Partido Verde Ecologista de México, Manuel Cota Cárdenas —quien recientemente votó a favor de un recorte presupuestal que afectará directamente a Baja California Sur— reapareció públicamente para lamentar la masacre. Señaló que una tragedia así no tiene justificación y expresó solidaridad con las familias afectadas.
El legislador aseguró que lo ocurrido obliga a reforzar la estrategia de seguridad y la coordinación institucional, al tiempo que reconoció la labor de las autoridades presentes. “BCS es tierra de gente buena y trabajadora. No podemos permitir que la violencia nos defina”, declaró.
Sin embargo, para amplios sectores de la ciudadanía el discurso resulta insuficiente frente a la crudeza de los hechos y al evidente debilitamiento de la percepción de seguridad en Loreto, considerado por años un destino pacífico y familiar.
Una comunidad herida exige respuestas
La muerte de un niño de 10 años —víctima colateral en un territorio que presumía armonía social— ha encendido las alarmas entre la población, que exige presencia permanente de las fuerzas de seguridad, investigaciones firmes y una estrategia real que impida que la violencia se normalice en uno de los principales destinos turísticos del estado.
Loreto, que alguna vez fue sinónimo de calma, hoy enfrenta un dolor colectivo y el urgente desafío de recuperar la confianza.
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