La Paz (California) — Una profunda preocupación se desató entre padres de familia de la escuela primaria Francisco González Bocanegra, ubicada en las calles Colima y Las Garzas, luego de que este martes se descubriera que un alumno llevaba consigo un arma de fuego, presuntamente una pistola calibre .22, cargada.

El hallazgo provocó una inmediata movilización de autoridades de seguridad, mientras el personal docente activaba el protocolo de emergencia para proteger al alumnado y dar aviso a las instancias correspondientes.

De acuerdo con un testimonio recabado por el reportero urbano Alejandro Patrón, un padre de familia relató que no es la primera vez que ocurren hechos que encienden las alertas en ese plantel. “Ya anteriormente se había sorprendido a un menor con un cartucho útil”, dijo con evidente preocupación al momento de recoger a su hijo.

Reacción oficial y mensaje a los padres

A través de un comunicado interno, la dirección de la escuela aseguró que la situación fue atendida “de manera oportuna y diligente”, y subrayó que en ningún momento se puso en riesgo la seguridad de los estudiantes. También pidió a la comunidad escolar no difundir rumores ni información sin confirmar, exhortando a mantener comunicación directa con las autoridades del plantel.

Por su parte, elementos de seguridad pública y personal de la Secretaría de Educación Pública Estatal continúan con las indagatorias para determinar cómo llegó el arma a manos del menor y reforzar los filtros de seguridad en la entrada.

Un llamado urgente a la prevención

Más allá del impacto momentáneo, este incidente reabre el debate sobre la presencia de armas en los entornos escolares y la necesidad de revisar con mayor rigor las mochilas y pertenencias de los alumnos, sin vulnerar sus derechos, pero priorizando la seguridad.
Padres y maestros coinciden en que se requiere una acción conjunta: educación en casa, acompañamiento psicológico y vigilancia constante para prevenir tragedias.

La escuela “Francisco González Bocanegra” vuelve así a estar en el centro de la atención pública, convertida —involuntariamente— en reflejo de una realidad que inquieta: la fragilidad de la seguridad escolar en una sociedad donde los riesgos parecen estar cada vez más cerca de los niños.