La Paz (California) — En el marco de los patrullajes implementados por la Policía Estatal Preventiva (PEP) en los municipios de La Paz, Comondú y Loreto, las autoridades lograron la detención de once personas, dos de ellas con órdenes de aprehensión vigentes, además del aseguramiento de drogas y armas de fuego, informó la Secretaría de Seguridad Pública del Estado.

Uno de los casos se registró en el poblado Palo Bola, municipio de Comondú, donde los agentes marcaron el alto a un hombre que se identificó como José “N”, de 34 años de edad. Durante la revisión, le fueron asegurados 31 envoltorios de plástico que contenían una sustancia con las características del cristal.

En otras dos acciones realizadas en las colonias Santa Fe y Miramar, elementos estatales detuvieron a dos personas, de 17 y 36 años, quienes también portaban envoltorios con la misma sustancia ilícita.

Asimismo, en el marco de patrullajes interinstitucionales desplegados en los municipios de Loreto y Mulegé, policías estatales detuvieron a cinco personas tras encontrarlas en posesión de armas de fuego. En uno de los casos, se aseguró un arma calibre 9 milímetros con su respectivo cargador abastecido con 16 cartuchos útiles, además de dos cargadores adicionales, uno de ellos también con 16 cartuchos del mismo calibre. En otro hecho, se decomisó una arma corta con su cargador correspondiente.

Por otra parte, tres individuos fueron aprehendidos por órdenes judiciales vigentes, entre ellos una persona capturada en el módulo de revisión secundaria del puerto de Pichilingue, acusada de robo en lugar habitado, daños y lesiones, y robo calificado.

Los detenidos, junto con la droga y las armas aseguradas, fueron puestos a disposición de la Agencia del Ministerio Público, que dará seguimiento a las investigaciones y determinará su situación legal.

Las autoridades reiteraron que estas acciones forman parte de la estrategia permanente de seguridad en Baja California Sur, enfocada en combatir la venta de drogas, la portación ilegal de armas y la detención de personas con cuentas pendientes con la justicia, con el objetivo de reforzar la tranquilidad de las comunidades.