
San José del Cabo (California) – Vecinos del poblado de La Playa han alzado la voz a través de redes sociales y grupos comunitarios para denunciar un presunto abuso de autoridad. Elementos de la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (CONAPESCA) y la Secretaría de Marina (SEMAR) detuvieron esta semana a pescadores locales a pesar de contar con permisos vigentes, desatando indignación.
El hecho:
- Autoridades federales interceptaron una camioneta que transportaba seis atunes capturados por residentes de La Playa.
- Videos compartidos muestran el operativo, con vecinos exigiendo explicaciones a los oficiales – quienes no respondieron – mientras decomisaban el pescado.
La reacción: Comunidad en Pie de Guerra
«¡Están rompiendo nuestras tradiciones! La Playa es un pueblo de pescadores, siempre nos hemos movido el pescado, es nuestro sustento», declaró un denunciante visiblemente afectado. «Es increíble que multen a los pescadores del pueblo por mover pescado… A 50 metros de sus casas, con la Marina y CONAPESCA armados. Las cosas están al revés en Los Cabos».
Permisos Vigentes, Argumento Débil:
Juan Guillermo Amador Peralta, uno de los pescadores afectados, destacó la legalidad de sus acciones: «Utilizamos cañas y carretes, tenemos licencias individuales y nuestras embarcaciones están registradas». Aún así, les confiscaron los atunes bajo el cuestionable argumento de que eran «demasiados».
Críticas a la Doble Moral Gubernamental:
Activistas ambientales, como Virginia Güereña, condenaron la acción. Señalaron la ironía de que el supuesto gobierno «transformador» persiga a pescadores artesanales, mientras no actúa con contundencia contra las grandes embarcaciones depredadoras avistadas recientemente cerca de Isla Cerralvo, que realizan extracción masiva de atún.
Contexto Clave: Tensión Creciente
Este incidente no es aislado. Refleja la creciente tensión entre:
- Pescadores ribereños: Comunidades tradicionales que dependen de la pesca artesanal.
- Embarcaciones industriales: Barcos de gran calado, con permisos federales, pero acusados de prácticas depredadoras cerca de la costa.
Organizaciones locales exigen con urgencia la regionalización de los permisos de pesca, un paso crucial para proteger tanto los recursos naturales como la economía de las comunidades costeras históricas como La Playa.
La demanda es clara: Respeto a los derechos de los pescadores tradicionales y acciones reales contra la pesca depredadora industrial.
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