GOBERNANTES DE HOY, ¡NOS FALLAN!

LA INDEPENDENCIA AYER Y HOY LA DEPENDENCIA

Por: Armando León Lezama

El pensamiento mexicano no está siendo escuchado por los que van y vienen en el gobierno, sea federal, estatal, municipal o delegacional. Quienes se sientan en las sillas del poder ejecutivo o del mandato territorial, atienden primero a los que tienen dinero, si es de alta suficiencia, mejor, y en esa cortesía de más, se ponen a las órdenes del sí señor.

Con esta política en el actuar de los gobernantes y autoridades, “el que paga, manda” es su línea de trabajo y quedamos en la indefensión millones de mexicanos.

Es cierto que éste actuar de los políticos, gobernantes y autoridades, no ha cambiado a lo largo de la historia contada y conocida por experiencia propia en los actuales humanos en el poder transitorio, que ellos aprovechan al máximo, y uno que otro, le queda el gusto de haber sido honesto.

Sin embargo, los honestos, poco pueden hacer ante el imperio de la corrupción y domina el hacer de los que nos fallan, de esos gobernantes de hoy, que en nada se parecen a quienes hicieron la lucha por la independencia del país mexicano desde antes de 1810 y después de 1810.

Quedan pequeñísimos, los mandamases de hoy, si de valores nacionales se les mide. No ignoran la historia mexicana; la desconocen a fuerza de intereses pequeños y malsanos.

Sin embargo, también la historia nos dice que tras el poder abusivo vienen las revoluciones, las manifestaciones de abajo hacia arriba, la toma de calles, y es de pensarse que la próxima lucha libertaria del Pueblo Mexicano, será feroz, como aquella expresada por miles y miles de compatriotas en 1810, quienes dejaron todo contra la autoridad represora y abusiva.

Y más allá, en el tema profundo de la lucha, dar identidad a México, un territorio ambicionado por extranjeros ayer, hoy y mañana.

Pero que al paso de dos siglos, so pretexto de la globalización y por invasión del neoliberalismo, los “mexicanos” en los Poderes Públicos de la nación, van asesinando a la República, la van transformando en un país para pudientes, que solo tenga por nombre México; pero sin los mexicanos de abajo.

Mientras, en el pensamiento del colectivo nacional, empieza a hervir en su sangre, unos tomando la justicia por propia mano; otros preparando escenarios alternos, desde el aspecto cultural que incluye todos los aspectos de la dinámica de la vida mexicana y el gobierno que nos falla, también contribuye sin saberlo en cada proceso electoral, con el mejor de los escenarios para el arranque de una insurgencia colectiva contra el neoliberalismo.

Por eso, quienes ostentan autoridad o gobierno, piensen más en hacer el bien a los mexicanos. No nos fallen.