Cívitas – Californio XX


*Don Braulio Maldonado Sández,  reconocimiento pendiente

 

Por Domingo Valentín CASTRO BURGOIN

0 a a a braulio maldonado sandezLa curiosidad por los libros me llevó, hace unos días, a la biblioteca pública «Profesor Pablo L. Martínez» de San José del Cabo, albergada en una vieja casona en el ahora conocido como centro histórico, digna de ser rescatada,  preservada y utilizada como monumento histórico para la cultura.

Me encontré agradables sorpresas bibliográficas, inesperadas.  Me ubico en algunos de estos textos, para hablar de Don Braulio Maldonado Sández, personalidad que trasciende a su muerte, y  que desde muy pequeño me atrajo, virtud a los comentarios de mi padre también ya fallecido, Saturnino Castro Sández.  Los cito nada más, aunque espero tener la oportunidad de reseñarlos en otra ocasión:  «La Revolución de los pueblos» (1986);  «Braulio.  Memorias del Lic. Braulio Maldonado Sández» (1986); «Baja California. Comentarios políticos y otras obras selectas» (UABC, 2006), de Aideé Grijalva;  Los dos primeros son de la autoría de Don Braulio, junto con «Qué bonito era mi pueblo», donde recuerda nostálgicamente a San José del Cabo.

Más político que escritor, Braulio Maldonado fue un hombre también de ideas, crítico,  polémico, antagónico y de fuertes convicciones:  nacionalista, regionalista, hombre de izquierda aunque pragmático, sudcaliforniano orgulloso de su pueblo, de su origen, de su gente, de sus apellidos, de su herencia colectiva.  Pocos paisanos como él trascienden su circunstancia.

Nació en 1903 en San José del Cabo, de una familia económicamente pobre:  su padre Cruz Maldonado  Zumaya y su madre  Luisa Sández Ojeda.   Y aunque llegó a la cúspide política como diputado federal del entonces territorio, fundador del Partido Socialista de las Izquierdas,  y primer gobernador de Baja California de 1953 a 1959, murió pobre, asistido por unos amigos aquí en la ahora colonia Santa Rosa,  en 1990.

Fue un sudcaliforniano, inquieto, luchador social, idealista y visionario a la vez.  Fue de los primeros estudiantes que becó el gobierno territorial de Agustín Arreola Martínez  (1924) y que envió a la ciudad de México a prepararse, en su caso como abogado, y su activismo político lo embarcó en distintos proyectos que incluso lo relacionaron con actividades de ultraizquierda, llegando, por otras motivaciones políticas, incluso a ser desterrado del país en los años setenta.

En sus memorias, contadas al entonces joven Milton Castellanos Gout,  (hijo de otro ex gobernador de Baja California, amigo de Don Braulio Maldonado) quien lo reseña en su libro «Braulio….», no dudó en señalar, respecto de su familia: «Fuimos una familia de gente muy pobre.   Mi padre fue ranchero, como se designa comúnmente al hombre del campo;  fue también trabajador de las minas de Santa Rosalía.  Según pude enterarme, sufrió un accidente de trabajo y durante su enfermedad aprendió el oficio de zapatero que le sirvió para sostener a su numerosa familia.  Fuimos diez hijos, hombres y mujeres, todos nacidos en el Territorio Sur, habiendo sido yo el menor de todos, y siendo muy niño murió mi madre, quedándole a él la pesada tarea de formarnos y educarnos».

Y tampoco para no dejar dudas de quien lo designó candidato del PRI al gobierno del Estado, el 13 de septiembre de 1953, afirmó que fue seleccionado y designado por su amigo  Adolfo Ruiz Cortínez, entonces presidente de la República y jefe nato del PRI:  «Esta es una verdad axiomática», reiteró.

A Don Braulio le tocó vivir en el viejo San José del Cabo, el de los trapiches, de la cosecha del tomate y de la pesca del tiburón,  del que se aprovechaban el aceite de su hígado y la aleta para exportación.  Mi tío Cano, José Carballo Valle, josefino de 91 años de edad, aún recuerda  las matanzas y los tiraderos que se hacían de estos animales en lo que ahora es la zona dorada de los hoteles de esta cabecera municipal, y el auge que representaba la exportación de tomate para la reducida población de aquellos tiempos;  y Don Braulio lo expresa con gran apego en su texto «Qué bonito era mi pueblo», escrito desde luego, cuando prácticamente estaba en el retiro político.

Don Braulio, independientemente de sus adversarios y detractores que los tuvo  (que lo llamaban el «mayordomo fiel»), y de las críticas que recibió por el ejercicio de su gobierno, fue un hombre que merece ser más conocido y reconocido en su Patria Chica, como lo decía el profesor josefino Jesús Castro Agúndez.  Fue un hombre de su tiempo y para su tiempo, y lo trascendió.

Generalmente los hombres del poder son proclives a la riqueza, a la fama, a las pasiones humanas que se desbordan ante la menor provocación. No son dados a escribir ni sus memorias, ni en libros tan modestos como los que editó Don Braulio, pues muchas veces van más a lo superficial que al fondo, menos a las ideas y a la búsqueda de la trascendencia de su pensamiento y de su lucha.

Alguien tendrá que documentar los últimos días que Don Braulio pasó en su tierra, en su San José, antes de morir, y podrá constatar, no solamente la sencillez, la pobreza y la soledad en que este hombre de ideas y de acción,  tuvo en sus últimos días;  días que quiso vivir en su pueblo, con su gente, de la que recibió la solidaridad, la comprensión y el afecto, y por qué no decirlo, la caridad.  Días en los que regresó para entregar sus últimas reflexiones, su último aliento, y sus últimos pensamientos a su tierra en la que quiso descansar y dejar sus restos mortales, pero las circunstancias se impusieron. Como le escribió, otro de sus biógrafos,  Leopoldo Martínez Herrera: «Por eso Braulio Maldonado es un hombre colectivo» Por eso la historia le pertenece».

Como pueblo sudcaliforniano nos dejó un legado de ideas, de acción política, de amor a su terruño.  Además, sin él preverlo, como un regalo inigualable, por intervención de un amigo que lo ayudó hasta el día de su muerte, a mí me dejó su  vieja poltrona de madera de encino regional, donde se meció sus últimos días.

Su homenaje póstumo como hijo pródigo, predilecto, preclaro de Sudcalifornia está pendiente.

#Sus comentarios y sugerencias las recibo en  mis correo:  civitascalifornio@gmail.com;  y valentincastro58@hotmail.com


Descubre más desde Colectivo Pericú

Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.

5 comentarios en “Cívitas – Californio XX

  1. Avatar de gato gato

    TAMBIEN TENGO RECUERDOS DE EL EN TIJUANA LO CONOCI POR ACCIDENTE. ERA TÍO DEL CHATO COMPAÑERO DEL COLEGIO MEXICO DE LA ALTAMIRA. EN OCASIONE IBA DE VISITA A LA CASA DE ELLOS. MUY SERIO Y DELGADO. DE LOS CHEMITAS ES SIERTO LA FORMA DE ACTUAR, SU MANO DURO CONTRA EL CRIMEN. LA LAGUNA SALADA EN MEXICALI TIENE MUCHOS RECUERDOS DE ESTOS Y DE EL. DE QUE MURIO POBRE TAMBIEN ES CIERTO

  2. Avatar de Popeye el Marino y Olivia Popeye el Marino y Olivia

    Excelente trabajo Domingo Valentin. Que bueno que los hagas pues en La Paz hay varios que suponen la historia de B.California S. de Angel Cesar para acá; y nó, antes de Mendoza Arámburo hubo muchos personajes muy interesantes como Don Braulio Maldonado Sández que llegaron a ser Gobernadores de nuestro Estado, antes Territorio por lo que fueron designados «desde el centro». Hombres ejémplares a toda cabalidad. Felicidades!!! Domingo Valentin

    1. Avatar de EL JUSTO EL JUSTO

      don braulio maldonado fue gobernador en baja california norte y uno de sus choferes de aquellos tiempos fue el manolo de santa rosalia muy conocido

    2. Avatar de VALENTIN CASTRO BURGOIN VALENTIN CASTRO BURGOIN

      Muchas gracias Popeye el Marino y Olivia. Ya lo sabemos, los hombres del poder son emblemáticos y polémicos. La historia los juzga y el juicio del Creador, inexorable y distinto al de los hombres. Personalmente, y coincido con muchos, valoro la inteligencia, la voluntad y el esfuerzo, las capacidades para luchar y dejar constancia del ideal. Jamas diremos que los hombres del poder son santos, ni que llegan a él por su espiritualidad. Pero son entes históricos y dejan huella en la historia. Vale la pena emular su esfuerzo y sacar las mejores enseñanzas, con las que creo debemos forjarnos y preservar, en este caso, a nuestro pueblo sudcaliforniano. Les saludo afectuosamente. Valentín Castro Burgoin

  3. Avatar de JUAN LUIS LOPEZ JUAN LUIS LOPEZ

    EN EL ESTADO DE BAJA CALIFORNIA LO RECUERDAN MUY BIEN POR HABER SIDO GOBERNADOR DE ESAS TIERRAS, PERO LAS PERSONAS MAYORES NO TIENEN BUENOS RECUERDOS, SIMPLEMENTE COMENTAN A SUS FAMOSOS CHEMITAS, GRUPO DE TROGLODITAS, POLICIAS POLITICOS, A QUIENES SE LES RELACIONA CON INFINIDAD DE DESAPARECIDOS, ANIQUILADOS, MUERTOS, POLITICOS QUE ESTE SUJETO BRAULIO MALDONADO LOS DESAPARECIA, IMPLEMENTO EL TERROR EN EL ESTADO, CUENTAN LOS MAYORES QUE EN LA FAMOSA LAGUNA SALADA DE MEXICALI, EXISTEN MILLARES DE CUERPOS QUE FUERON ASESINADOS Y ENTERRADOS EN ESE LUGAR, ASI ES QUE NO HAY QUE APLAUDIRLE NI RECONOCERLE NADA A ESTE CARNICERO SUDCALIFORNIANO, SUBDITO DE TRONSKY, ESTALIN, LENIN Y OTROS COMUNISTAS QUE SEGURAMENTE SE ESTARAN RETORCIENDO EN EL INFIERNO.

Deja un comentario