Por Víctor Octavio García

Reformas

• Tiempos difíciles
• Tiempos de retos

Contra todo lo negativo que está pasando en el país  desde la  inseguridad pública, narcotráfico, azotes climáticos, hasta  regiones y estados donde impera la “ley del revólver”, aparecen signos alentadores: el surgimiento de la sociedad civil, ahora no como complemento al abatimiento de la función estatal, sino en franca sustitución de esta, como ocurre en Michoacán y Guerrero, donde  las llamadas “defensas comunitarias”, prácticamente son los que ejercen la “violencia legal” y el uso de las armas para imponerse ante la delincuencia organizada ante un gobierno que no da una en la lucha contra el crimen.

En pocas palabras, ni los gobiernos estatales ni el federal han podido garantizar la esencia del pacto originario que en teoría política da sustento a la creación del Estado, y los ciudadanos hartos, sin nada que perder, se han armado para enfrentarse estos grupos criminales, como un último recurso. La criminalidad en México, se ha repetido hasta el cansancio, supera terriblemente los muertos por guerras civiles en cualquier país del medio oriente, aquellos que desde tiempos bíblicos se han debatido en guerras intestinas y se distinguen como lo más violentos del mundo; ese deshonroso lugar ya lo ocupa nuestro país, y esto trastoca todos los esfuerzos que se hacen para retomar el crecimiento económico, porque en este mundo globalizado, la estabilidad pende de hilos muy delgados, mientras la miseria crece con sus signos apocalípticos.

Al lamentable clima de inseguridad, donde ya no escapa ninguna zona del país, se suma la inestabilidad política derivada de la manera en que las reformas se han impuesto, con arreglos cupulares del pacto por México y desarreglos en las bases, incluso en contra de ellas, lo que demuestra que la clase política incrustada en las nomenclaturas partidistas oficiales, no canaliza el consenso como en los viejos tiempos del partido cuasi-único, donde los arreglos y repartos políticos y financieros mantenían el status quo socavado.  Ahí están las recientes reformas en telecomunicaciones, educativa y la hacendaria, que no dejaron contento a nadie; en esta lógica también se inscribe la otra aprobada un poco antes del régimen priísta, la laboral. En general y no obstante la necesidad de dichas reformas, no en el tenor que se efectuaron, solo ha provocado malestar y desaliento, porque más que a la pertinencia estructural, se observa a flor de piel que las mismas responden a los compromisos pactados con las oligarquías dueñas del país, y no a un proyecto de gobierno nacional en que debíamos ir todos.

Pero como todo tiene su tiempo, mientras que el enfado social lo ha capitalizado el PAN con su negativa a ir junto al PRI y al PRD en la reforma hacendaria, la balanza política puede equilibrarse con los costos que seguramente asumirán los panistas cuando hagan mancuerna con el PRI para sacar la reforma energética, que como se ve, es lo que falta para entregar, como en la época de Porfirio Díaz, nuestro más sacrosanto recurso del subsuelo a las mismas viejas compañías extranjeras expropiadas por el Presidente Lázaro Cárdenas.

Por lo tanto, mientras llega el 2015, los electoralmente arrinconados priístas, esperan la madre de todas las reformas, la energética, donde para poder aprobarla necesitan al PAN, con quien tendrán que renegociar las posiciones de gobierno que tienen con este partido, y entonces al menos en opinión pública el ganón será la izquierda; no toda, sino la que recién estrenará partido, el Movimiento de Regeneración Nacional, pues su  abierta oposición a la reforma  hacendaria –IVA en la frontera- y la confrontación que tendrá en las tribunas legislativas y más allá en la anunciada toma callejera del Senado,  le colocará  retóricamente en la defensa de la soberanía y el nacionalismo sepultados por los gobiernos de la derecha globalizadora –PAN– y del centro moderado –PRI– cuyos  gobiernos se han desdibujado por el pragmatismo y abierta sujeción a los poderes fácticos de México y del exterior.

Luego entonces las repercusiones de este poliedro político electoral en Baja California Sur pueden alterar las cuentas alegres del PAN que ya se siente reteniendo la gubernatura del Estado, así como los enjuagues que para la elección intermedia traman el resquebrajado leonelismo, reagrupado en lo que queda del PRD local con sus alfiles para la integración de la próxima legislatura federal. Finalmente, los saldos que la ciudadanía tiene de los partidos políticos y de sus personeros, poco puede alterar la ley de la crinolina, donde tan malo es el pinto como el colorado, pues la política ha demostrado, salvo sus excepciones, que es el terreno donde prevalecen agrupaciones mafiosas, donde lo que les importa son los intereses económicos de grupo, utilizando  perversamente las necesidades sociales y la buena fe de muchos ciudadanos que siguen esperando ver volar a Superman. ¡Qué tal!

Para cualquier comentario, duda o aclaración, diríjase a abcdario_@hotmail.com

SOBRE EL CABRESTO
Como uno de los grandes pilares en el desarrollo de BCS calificó el Dip. Juan Alberto Valdivia, Presidente del CDE del PRI en BCS, al Diputado Constituyente, Armando Trasviña Taylor, al ser homenajeado ayer por el Grupo Reflexión que lidera Raúl Zavala. En evento en el que se contó con la presencia de los también Diputados Constituyentes María Luisa Salcedo de Beltrán y Eligio Soto López y de los ex gobernadores del estado Ángel César Mendoza Arámburo y Guillermo Mercado Romero, Juan Alberto Valdivia expreso: “Estamos condenados a no poder dimensionar el presente y el futuro, pero también es muy importante reconocer a quienes le han dado nombre a estas fechas y por supuesto usted es uno de los grandes sudcalifornianos que han escrito y que han hecho posible que Baja California Sur sea un gran estado». Destacó, asimismo: “Ha sido un hombre ejemplar, un padre ejemplar y eso es algo que es digno de reconocer y es a lo que he querido referirme, creo que quienes estamos participando en política debemos aspirar siempre ha terminar nuestra carrera con un buen nombre, con una trayectoria limpia y poder ver de frente a los sudcalifornianos como usted lo hace y poder disfrutar que las familias como la suya tengan un reconocimiento social como el que le tienen los sudcalifornianos, yo quiero reconocérselo don Armando en presencia de sus familiares, y de la familia priísta que seguimos siendo una gran familia que le apostamos a la unión de los sudcalifornianos y al desarrollo de Baja California Sur, y por supuesto usted es uno de los grandes pilares»……Salud.