Por : Salvador Castro Iglesias

Correo electrónico: salcasis@yahoo.com.mx

Y que llegamos a las 100 años de “Festejar” el Día Internacional de la Mujer.

¿En realidad debemos festejarlo?, cuando en lugares como Guanajuato el porcentaje de violencia de género se mantiene como uno de los más altos en el País y en casi todo el territorio Nacional, vemos como se aprueban y modifican Leyes para sancionar el aborto agregando causales como “Mala Fama” para encarcelar a las mujeres.

Así  como lo leen amigos, ahora resulta que si una mujer tienen “mala fama” (cosa que es bastante difícil de determinar Jurídicamente por un Juez), las féminas que cometan el pecado de abortar (aunque hayan sido violadas), serán encarceladas y sus condenas podrás triplicarse por ese hecho.

Pero eso sí, debemos de enviarles flores a todas la mujeres este 8 de Marzo para festejar…¿festejar qué?… ¿Acaso debemos festejar el que hayan sido violadas, maltratadas, usadas como carne de cañón en las revueltas sociales, asesinadas, vejadas y todo tipo de atropello por sus contrapartes masculinas?.

Realmente no deja de asombrarme de lo mal que nos hemos portado con las mujeres, pareciera que cada día que pasa, nos regresamos a la edad de las cavernas en lugar de avanzar hacia nuestro destino como una gran nación.

En estados como Veracruz, Oaxaca, Durango, Guanajuato, y no se diga en Cd. Juárez, se han endurecido las leyes y atentado en contra de las mujeres, y lo más triste es que en ello han participado también mujeres.

No cabe duda de que la Iglesia Católica tiene la mano metida en este penoso u oprobioso asunto, alegando lo pecaminoso de que las mujeres puedan decidir sobre su propio cuerpo y como en el caso de las comunidades Gays, se vayan con todo contra las féminas.

¿Qué nos está pasando?, ¿hacia dónde vamos como País?. En verdad no lo sé, pero si quiero enviarles a todas las mujeres un fuerte abrazo, invitándolas a que continúen con su lucha, que sigan educando a nuestros hijos, sigan siendo nuestras compañeras y sobre todo, que no desistan de sus ideales a pesar de las adversidades, sabedoras de que todavía quedamos muchos hombres que reconocemos su labor diaria como compañeras en igualdad de circunstancias.

Nos leemos mas adelante…